miércoles, 14 de mayo de 2008

Laberinto de espejos





A veces parece que no hay salida
cuando en realidad lo que ocurre
es que no sabemos buscarla.







Como olvidar la vez que estuve

en un laberinto de espejos,

como olvidar cuanto anduve

perdido entre sus reflejos.


Como olvidar la angustia

y ese nudo en la garganta,

que te nubla y ataranta

ocultando su salida.


Como olvidar la vez que estuve

en un laberinto de espejos.


Amigo si lees estas líneas

confundido, solo y triste,

hastiado de la vida

sin saber cuando te perdiste.


Escucha cuanto te digo:

que no hay puertas ni cerrojos,

sólo es que no ves la salida

por que has de cerrar los ojos.

2 comentarios:

Dulcinea dijo...

...justo hace unos días hablaba yo de eso en uno de mis post...

...me encantan tus sinsentidos....voy a dar otra vueltecilla....

Di Verso dijo...

Lo sé, pues fueron tus palabras las que inspiraron las mías. :-)

Celebro que te gusten.
Está usted en su casa dama del Toboso.