Hoy mi espíritu no es uno sino un hormiguero de ellos en permanente batalla. Hoy soy rabia, frenesí y desasosiego. Hoy me desbordan las emociones y me arrastran. Mañana tengo de nuevo rodeo.
Hoy la tormenta se lleva otra vez mi barco donde ella quiere, donde me lleve. Mañana a retomar el camino si no me llueve.